Triple Diosa, una verdadera simbología espiritual

En la figura de la triple Diosa, procedente de la cultura Wicca, se representa a una deidad envuelta en tres fases de su ciclo vital. Así es como se manifiesta la figura femenina de la Doncella, la Madre y la Anciana. Cada una representa a su vez a una fase de la luna, la luna creciente, llena y menguante.

Como se puede ver, es una representación con una gran simbología en la vida, el crecimiento espiritual y el crecimiento en la sabiduría ancestral.

NACIMIENTO:
La Doncella con su fase creciente representa el nacimiento y el asomarse a una nueva vida llena de placeres que disfrutar y descubrir por primera vez con energía lo que le rodea. Ver todo su alrededor desde una nueva perspectiva, aún innata y pura sin los devaneos sociales. Con creatividad de un alma sin prejuicios, con una perspectiva clara. Ella es quien te atraerá a un despertar espiritual.

AMOR:
Con la fase de luna llena, la Doncella deja atrás la euforia de la juventud para convertirse en una Madre madura, paciente y colmada por la responsabilidad de la creación que ya siente en su vida. En esta fase llega el fruto de la experimentación con la consciencia de responsabilidad hacia lo que se ha creado y lo que esto conlleva. Llega el momento de actuar como protectora y con su fortaleza interior enseña lo que es el amor incondicional.

MUERTE:
Y llega la fase lunar de la luna menguante y con ella la Anciana. Con la sabiduría que ha ido recabando durante su periplo vital, está preparada para el culmen de su vida. Tiene consciencia espiritual tan elevada que entiende y acepta el ciclo de la vida con una total visión de madurez espiritual que no habría sido posible sin pasar por las anteriores fases.

Ella entiende que debe de cerrarse el ciclo vital para que se pueda dar otra nueva fase de conocimiento. La anciana enseña a ver la vida desde su perspectiva de su total madurez espiritual. Esa madurez de sabiduría y aceptación puede crear la sensación de que se trata de un alma fría, aceptando la soledad y la dureza de la vida. Aunque lo que se procesa en su interior es simplemente la aceptación de la vida desde un amor incondicional maduro y una elevada integración espiritual.

Este estadio espiritual te permite tener una visión de la vida física más completa y aceptar su significado más allá de lo que vemos en el día a día. Y esto hace que los sentimientos de miedo hacia la muerte no existan y la comprensión de la dinámica de la dualidad (bien y mal, salud y enfermedad…) sea global desde el amor incondicional sobre la verdadera razón de la existencia.

¿QUIÉN PUEDE LLEVAR UN SÍMBOLO TRIPLE DIOSA?
No es necesario que seas wicano o wicana para lucir estos símbolos, es más, ayuda en tu crecimiento espiritual mantener cerca de ti el recordatorio del verdadero propósito vital de la vida. No en vano la figura femenina representa lo espiritual.